Cuando un festival como Glastonbury, que cada año reúne la friolera de 135.000 fieles aficionados a la música, recibe una petición firmada por 50.000 personas para hacer desaparecer a uno de sus artistas de su cartel anual, es algo como para tener en cuenta. Muchos fans no están nada contentos con el hecho de que Kanye West encabece el cartel de Glastonbury 2015. Uno de sus asistentes, Neil Lonsdale, lanzó una petición en Change.org para retirar al artista del cartel declarando que «Kanye West es un insulto a los fans de la música en todo el mundo. Prevenid esta injusticia musical. Gastamos cientos de libras para asistir al festival y al hacerlo, esperamos un cierto nivel de entretenimiento. Kanye ha sido muy franco en sus puntos de vista sobre la música. Él debe escuchar a su propio consejo y ceder su lugar a alguien que se lo merezca».
El asunto ahora es que la petición de Neil Lonsdale ha logrado reunir 50.000 firmas, dejando bien claro el gran descontento que existe con el cabeza de cartel. Con tal cantidad de firmas reunidas -y con la cantidad de dinero que se embolsan gracias a los asistentes- se podría decir que los organizados del festival acabarían haciendo caso omiso de aquellos que año tras año consiguen hacer que Glastonbury sea el festival que es: los fans. Por desgracia, y por el momento, no se sabe si dicha petición acabará llegando a buen puerto.